"Ocho amaneceres" en el Cocui

 Después de varios dias alejado de la civilización y porsupuesto de cualquier tipo de tecnología, acabamos de llegar a casa de Marco en Varinas, a unas 8 horas de Caracas. Así que os haré una breve de lo que hemos hecho estos dias

Todo ha salido bien y hemos logrado abrir una nueva linia por la pared de Ritacuba en el Cocui, esto se encuentra a unos 5.000 metros de altura. 

Los porteos han sido duros, unas dos horas de pateo hasta la pared, pero ha merecido la pena. La ruta que hemos abierto hace unos 500m y va por la pared central de la montaña, una boveda de techos enormes muy codiciada ya que nadie habia podido subir por ahí hasta la fecha. Con largos de A3 y con una dificultad de hasta 8b, no pudimos liberar todos los largos ya que  solo disponíamos de 8 dias. Dormiamos en una repisa y cocinabamos con el agua de las estalactitas de hielo que se formban en la pared. La rutina era abrir un largo, fijar las cuerdas y yumear todo el material para al dia siguiente continuar abriendo largos. Largos de hasta 6 horas de escalada que se hacían dificultosos por el frio, la dificultad de protegerlos y la altura a la que escálabamos. 

El ultimo día fue el más duro, andábamos a contrareloj ya que venía el Arriero (un señor con mulas) para recogernos y ayudarnos con los bultos en el viage de vuelta, unas 8 horas de caminata.

Estábamos en la parte final de bóveda, así que ese dia tocaba madrugón. Nos levantamos alas 4:30h para empezar a yumear de noche y poder empezar a escalar con los rayos del sol ya que habíamos calculado que tardábamos unas dos horas en llegar arriba y alas 11h se marchaba el sol. 

Debido al frio, estos últimos largos fueron los más duros, casi se me congelan los pies se me pusieron morados y se me incharon mucho. Pero conseguimos salir de alli entre los tres, haciendo ese largo practicamente en artificial. Tuve que poner un clavo de progresión, una uña y con la otra mano poner un spit para poder seguir progresando y protegiéndome porque no había fisuras...una locura...acabamos la via casi de noche.

Pero ha merecido la pena de verdad, ha sido una buena aventura, difícil, compleja y complicada pero donde hemos aprendido mucho y se nos han abierto nuevas fronteras y retos. Queda mucho por hacer!! 

El nombre que le hemos puesto a la via, es "Ocho amaneceres"

Lo tenemos todo grabado, así que espero poder compartirlo bien pronto! 

A parte de mis compañeros, Dani, Marco y Toti, dar las gracias a Rafael Olivares(fotógrafo), Rafael Escavo (nuestro papa), Ricardo Cancelado por la logistica, Juan Pablo Caballero (fotógrafo), Alexandra por su hospitalidad, a Enrique,Wili,Manolo, Wilmer, al hostal de Colombia, a Rafa en el Cocui y a todos los que nos habeis acogido y regalado grandes momentos. 

Muchas gracias a todos!